viernes, 17 de octubre de 2014

¿Sonreímos?


¿Recuerdas? Solías sentirte pequeño, inútil en este mundo, un estorbo para la sociedad, incluso solías sonreír mientras por dentro te inundabas en lágrimas... Pero, ¿sabes qué? Aquí estoy, no sé por qué llegué a ti, ni cómo me encontraste, tampoco sé lo que va a ser mañana, pero sí lo que puede ser hoy.

Quizás no sea el día con el que más ganas te has levantado, quizás te hayas pasado la noche entera dando vueltas en la cama, o quizás hayas dormido tan profundo que las horas se te hicieron minutos; como nos suele pasar cuando estamos juntos; pero quizás haya alguien fuera que esté esperando ver tu maravillosa sonrisa, quizás alguien necesite uno de tus abrazos que lo sumerja en una profundidad tranquilidad donde se sienta totalmente protegido, quizás tu madre necesite una persona que le anime como ella solía hacerte cuando eras pequeñito, o quizás se levante más sonriente que nunca y necesite comerte a mimos y besos.

Quizás, quizás... Nuestra vida es un vaivén de "quizás".

Ahora te preguntarás a dónde quiero llegar con esto; y es algo muy sencillo. Simplemente quiero que sepas que al igual que existen dudas, también existen seguros, y lo que seguro que vas a tener hoy es a una madre que te quiere, te seque las lágrimas o te acurruque, como solía hacer; tendrás una hermana con la que pelearte, con la que compartir secretos...; tendrás un padre que te levante cuando te caigas, que te dé capones cuando lo hagas mal...; tendrás amigos por los que darías la vida, con los que has pasado muy buenos momentos, con vuestras tonterías, vuestras risas...; tendrás esa persona que te quiera tal y como eres, por la cual merecerá la pena luchar.
Por esas personas que te hacen ser como eres, por las que merece la pena sonreír para que sonrían... Y porque existe esa persona que no dejará de luchar por ti, que no puede verte triste, que hace lo imposible por alegrarte los días, que te dé abrazos o besos inesperados, que te quite la sudadera o las camisetas para andar por casa...
Porque ninguna de esas personas merece el castigo de no verte sonreír...

¿QUÉ GANAS TIENES DE HACERLES SONREÍR HOY?


 
Porque nadie es tan pobre como para no regalar ni una sonrisa